Una Cenicienta moderna (2004) es una encantadora y reconfortante comedia romántica que le da un giro moderno al cuento de hadas atemporal de Cenicienta. Dirigida por Mark Rosman y escrita por Leigh Dunlap, la película está protagonizada por Hilary Duff como Sam Montgomery, una chica de secundaria que enfrenta los desafíos de las dificultades familiares, una madrastra difícil y un romance secreto.
La película cautiva al público con sus personajes identificables, humor y un mensaje conmovedor de autodescubrimiento y la importancia de creer en uno mismo.
La historia gira en torno a Sam, una adolescente inteligente y de buen corazón que trabaja en un restaurante propiedad de su malvada madrastra, Fiona (interpretada por Jennifer Coolidge).
A pesar de su difícil vida familiar, Sam sueña con un futuro mejor y está decidida a asistir a la Universidad de Princeton. Su vida da un giro romántico cuando comienza una relación anónima en línea con un chico popular y atractivo de su escuela secundaria llamado Austin (Chad Michael Murray).
Se comunican por correo electrónico y chat sin revelar sus verdaderas identidades, y Sam siente una sensación de libertad y emoción en sus conversaciones.
La trama toma una forma familiar cuando Sam y Austin acuerdan encontrarse en un baile de Halloween, donde Sam llega disfrazada, como en el clásico cuento de Cenicienta.
Sin embargo, como en el cuento de hadas original, la magia es breve y Sam debe irse antes de que Austin descubra su verdadera identidad. La escena del baile es uno de los momentos más memorables de la película, ya que combina romance y humor. Sam deja su teléfono y Austin se embarca en una búsqueda para encontrar a la chica de sus sueños, lo que da lugar a una serie de momentos conmovedores y divertidos.