“Prometeo”, dirigida por Ridley Scott y estrenada en 2012, es una película de terror de ciencia ficción que sirve como precuela de la icónica película de Scott de 1979, Alien. La historia explora los orígenes de la humanidad, mezclando elementos de horror cósmico, exploración y supervivencia. Prometeo está protagonizada por Noomi Rapace como la Dra. Elizabeth Shaw, Michael Fassbender como el androide David, Logan Marshall-Green como el Dr. Charlie Holloway y Charlize Theron como Meredith Vickers.
Ambientada a finales del siglo XXI, la película sigue a la tripulación de la nave espacial Prometeo en su viaje a un planeta distante después de descubrir antiguos mapas estelares. Shaw y Holloway, impulsados por la esperanza de encontrar a los creadores de la humanidad, lideran la expedición financiada por Weyland Corporation.
Sin embargo, al llegar al misterioso planeta, la tripulación se encuentra con mucho más de lo que esperaban. El grupo explora estructuras alienígenas que insinúan una historia siniestra, y se encuentra con criaturas aterradoras y peligrosas armas biológicas. Mientras la tripulación lucha por sobrevivir, descubre gradualmente pistas sobre el origen de la humanidad y una amenaza potencial que podría destruirla.
Prometeo es notable por sus temas filosóficos, particularmente en torno a la creación, la fe y la búsqueda de significado. Planteó preguntas sobre la existencia y los orígenes humanos, lo que polarizó a algunos espectadores que esperaban una experiencia de terror sencilla. La película recibió elogios por su impresionante diseño visual, efectos especiales y la actuación de Fassbender como David. Sin embargo, enfrentó reacciones mixtas por sus respuestas ambiguas y preguntas sin respuesta, así como por su trama compleja. A pesar de esto, Prometeo fue un éxito de taquilla y preparó el escenario para la secuela Alien: Covenant (2017), que exploró aún más la mitología de la franquicia.